El pragmatismo de Occidente ¿o su miseria?

martes, noviembre 22, 2005

Docentes de ESO.: Reforma urgente

(por Carlos A. Trevisi)

Todo aquello por lo que nadie abogara en las manifestaciones contra la Ley de Educación -lo que deja en claro que otros motivos cundían cuando se llevaron a cabo- ha sido asumido por el gobierno: una reforma urgente de la formación de los docentes de la ESO.
La presencia del director del "Informe PISA" en España no es una mera casualidad: es el aval que necesita el gobierno para que se produzca el verdadero y único cambio que impulsará a nuestros chicos en el acceso a la información como plataforma "sine qua non" para que se adentren en el mundo del conocimiento.
Debe aspirarse a un sistema educativo al que nada le sea ajeno; tiene que abarcar todas las variables. A diferencia del actual que es rígido, impenetrable y al que le es ajena nada menos que la realidad, el nuevo tiene que ser homeostático, en permanente equilibrio, abierto, amplio, crítico, dialógico...
El mundo nos alerta sobre el signo de los tiempos: el cambio vertiginoso, y sobre sus características más elocuentes: la precisión y la mundialización. Para insertarnos en ese mundo es necesaria la imaginación. Y la educación en España no ha propendido a la imaginación, ha sido meramente lógica, enciclopedista. España debe actualizar sus patrones educativos para quitarse de encima la obsolescencia de un sistema que sometió las iniciativas individuales. El resultado ha sido que, no explotando lo que "natura da" -imaginación- y alentando lo que "Salamanca presta" – lógica -, nos hemos transformado en obedientes esclavos de la imaginación de los demás.
Se educa en satisfacción de armonías en un entorno imaginativo. Lo educativo es aprender a elegir, a cambiar y a crecer y no, nunca, Felipe II, que se reserva, si, por único e irrepetible, el derecho a ser redescubierto cada vez que se plantea el tema de elegir, cambiar o crecer.